Demos más experiencias a nuestros hijos

Si hay algo que queremos darle a Giulia, es una infancia llena de experiencias de todo tipo.

Como familia, siempre preferimos hacer paseos, cualquiera, ya sea hacer picnic en el parque frente a la casa como hacer viajes lejanos.

Y es que con Giulia, desde que era muy pequeña, de meses, empezamos a viajar con ella.

A Grace y a mí nos gusta mucho viajar, desde que estamos juntos, siempre hemos buscado la forma de ahorrar para irnos de vacaciones, algunas veces a relajarnos a una playa, otras a conocer lugares nuevos y sumergirnos en museos (ver post: 21 tips para ahorrar dinero y viajar más)

Desde que Giulia llegó a nuestras vidas, decidimos que seguiríamos viajando y siempre con ella, por eso hasta ahora, hemos viajado los 3 juntos.

Siempre tuve un sueño: entrar de la mano o cargando a Giulia y disfrutar de la Capilla Sixtina. Como admirador del arte renacentista, quería poder llevar a Giulia a Roma y Florencia, lugares mágicos para mí, donde pude cumplir mi sueño.

Bajar la estrecha escalera y entrar por la pequeña puerta que da el acceso a la Capilla Sixtina, es algo que nunca olvidaré. Mis ojos se humedecieron un poco y esos segundos fueron eternos. Eterno como el recuerdo que tendré de Giulia, de 3 años, con la boquita abierta al ver todo eso. Verla corretear por los pasillos del Vaticano que tienen tanta historia, tomar fotos ella misma e interesarse por lo que ve.

Pero, tengamos claro que hacer eso, requiere una dosis de energía adicional pues, los niños pequeños sobretodo, se cansarán, querrán que los cargues, que juegues con ellos, que vayas a su ritmo, por eso los viajes en familia con niños pequeños (ver 16 tips para viajar con niños sin tablets ni celulares), tienen otra velocidad, tal vez más lenta, pero definitivamente los recuerdos que generarán serán para siempre.